En Rosario ya hay materiales para la construcción con alzas del 133,4%

2022-05-06 18:04:38 By : Mr. Edwin Lu

Pum para arriba. El asfalto aumentó un 94,4 por ciento y su impacto se siente en la obra pública.

Un informe elaborado el viernes por la Municipalidad de Rosario reveló que los precios de los materiales para la construcción pegaron un salto enorme por encima de la inflación. Como ejemplo: pisos y revestimientos cerámicos aumentaron un 133,4 por ciento interanual, el asfalto un 94,4 por ciento y los caños de PVC un 87,5 por ciento.

En una ronda de consultas con empresarios, cámaras empresariales y el propio Estado municipal hablan de un mix de variables: precios que se acomodaron en “pospandemia”, problemas de importación de insumos, aumento de combustibles, devaluación y demanda sostenida. Todo, empuja los valores.

La publicación en el portal de datos abiertos del municipio releva los índices de precios de materiales de la construcción al mes pasado. Y desglosa rubro por rubro estas variaciones tanto en relación al mes anterior, respecto al mismo mes pero de 2021 y el acumulado del año.

Si se escoge mes contra mes de 2021 contra 2022 se aprecia que en el asfalto la suba fue del 94,4 por ciento, caños de PVC 87,5 por ciento, chapas galvanizadas 76,7 por ciento, tubos estructurales 69,8 por ciento. Es decir productos que superan holgadamente la estimación más pesimista de la inflación acumulada, que ronda el 52 por ciento oficial.

En el informe se destaca que en promedio los índices de precios de materiales de la construcción relevados han tenido un incremento de alrededor del 3 por ciento con respecto al mes anterior.

La variación mensual más alta se dio en el hierro fundido, registrando una variación del 5,6 por ciento. La variación más alta con respecto al mismo mes del año anterior se dio en el rubro pisos y revestimientos cerámicos, con un valor del 133,4 por ciento.

En un recorrido de consideraciones en la actividad La Capital consultó al gerente de Accesaniga SA, Adrián Cirimele. “De movida, alta demanda y poco stock en las fábricas fruto del atraso productivo del 2020. A eso hay que sumarle problemas de importación de insumos (como pigmentos, esmaltes), la incidencia de precios combustibles por transporte y logística; además el gas a las industrias, que sí aumentaron”.

El directivo también indició que “a falta de poder importar productos sustitutos y tener una demanda sostenida empujan los precios, que se ubican según nuestros cálculos en el orden del 100 por ciento, lo cual es muchísimo igual”.

En resumen: los precios se acomodaron en función de la “salida” de la pandemia, problemas de importación de insumos, aumento de combustibles, y demanda sostenida. Los comercios de venta al consumidor final no son formadores de precios, ni cambiaron la rentabilidad”, aclaró Cirimele.

Para Verónica Razzini, socia de Razzini materiales, los listados están que arden con los precios. “El cemento aumentó un 20 por ciento en un mes, e incide la suba de los combustibles porque impacta en el traslado de productos y los formadores del rubro no lo pueden absorber. Pero hay además una sumatoria de cosas como la pandemia y la alta demanda que no pudo cubrirse en la totalidad porque la producción no daba abasto. Las plantas y fábricas que estuvieron cerradas y luego abrieron, el factor Covid, los contagios, el personal raleado todo esto se estabilizó recién hace 40 días”, consideró Razzini a lo que sumó los premios extraordinarios y bonos “impagables” para que los sindicatos “no bloqueen la actividad”.

Tras una caída estacional en las ventas, las fichas apuntan a un repunte para abril en el rubro. “En este contexto inflacionario, cerrar un precio sigue siendo la opción más buscada”, indicó.

Desde Gaspel sanitarios y calefacción, Eduardo Maradona coincidió con el resto de los consultados. “En cuanto a lo importado, cuyos insumos se usan mucho en nuestro rubro, tuvieron un crecimiento mayor, muy importante. Y esto tiene que ver con el dólar, que algunos dicen que si hubiese acompañado la inflación hoy tendría que valer 360 pesos”.

Desde la Cámara Argentina de la Construcción, delegación Rosario (Camarco), su gerente Rubén Llenas indicó que “la preocupación es muy grande porque toda la economía sufre una inflación desmedida, pero los materiales están por encima del Indice de Precios al Consumidor. La inflación fue del 52 por ciento y tenemos relevado un 67 por ciento de suba en estos rubros”.

Pero además del aumento de precios existe demora en la entrega de los materiales. Esto en un contexto de 14 meses de suba consecutiva del Indicador Sintético de la Actividad de la Construcción (Isac). “Esto pone trabas a la hora de mejorar el incremento de la actividad”, apuntó para agregar: “Se ha ralentizado, al quedarse esperando 20 días el stock, el tema es que esto se puede agravar sino se aumenta la producción. Tenemos indicadores de enero y febrero que sufrieron las fábricas por los contagios de Covid con más de 40 por ciento en las industrias y sumado a lo estacional y atrasos, provocaron esta escasez”.

En una expectativa de reducir la capacidad ociosa en fábricas se ha demorado el proceso de recuperación ante un escenario de incertidumbre económica. “Estamos en materia de empleo en cifras similares a tres años anteriores, son todos factores combinados”, remarcó.

El secretario de la Producción municipal, Sebastián Chale, consideró que “todas las actividades vinculadas a la construcción y también a su industria relacionada con este rubro han registrado subas muy marcadas, producto que se venía de dos años negativos como fueron el 2019, por las condiciones económicas generales y el 2020, donde se registró una cuasi paralización de la obra pública y la actividad en obras privadas, que también fue muy limitada”, consideró el funcionario.

Sin embargo, Chale indicó que se trata de un rubro que se recupera rápidamente y que en poco tiempo registró niveles prepandémicos.

En línea con estas consideraciones, el municipio también difundió la cantidad de permisos para la construcción, que en los dos primeros meses del año llegaron a 222.

Esto representa una suba interanual del 7,3 por ciento respecto del mismo periodo del año anterior.

En metros cuadrados equivale a 80.674 de superficie autorizada para edificación con un alza interanual del 20,7 por ciento, a iguales meses de 2021.

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